El alcalde de Algeciras y senador, José Ignacio Landaluce ha expresado al embajador británico en España, Alex Ellis, la situación de «incertidumbre» en la que se encuentra el Campo de Gibraltar tras el anuncio del acuerdo alcanzado entre los gobiernos de España, del Reino Unido y la Unión Europea en torno a la colonia. Landaluce ha recibido en el Ayuntamiento al embajador británico acompañado por el primer secretario político de la Embajada, Tom Fardon.
El alcalde de Algeciras ha explicado que existe una continua incertidumbre porque ni el Gobierno de España ni la Unión Europea han contado nada con claridad a esta comarca. José Ignacio Landaluce señala que no se conocen los detalles de lo que se está pactando y, sin esa información, no se puede hacer ningún tipo de balance.
El también presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado ha recordado que la transparencia en este proceso «es fundamental», y que hasta el momento los representantes institucionales del Campo de Gibraltar no han recibido ningún documento oficial ni explicación suficiente que despeje las dudas sobre los términos reales del acuerdo. Añade la necesidad de claridad, conocimiento y respeto hacia esta comarca. Landaluce ha enumerado cuestiones como la creación de una Zona Económica Especial, la cooperación medioambiental, el equilibrio de condiciones fiscales y portuarias, el control del contrabando y el impacto en el comercio local, cómo asuntos que siguen sin una respuesta concreta por parte de ninguno de los dos gobiernos. El regidor ha remarcado que el acuerdo no puede suponer un perjuicio para los comercios, trabajadores, consignatarios, aduaneros, gasolineras ni estancos y tampoco para la actividad del puerto de Algeciras, pieza clave para la economía de España, Andalucía y el Campo de Gibraltar. Del mismo modo, ha advertido de los riesgos de un posible encarecimiento de las viviendas en la comarca como consecuencia de un acuerdo desequilibrado, y ha dejado claro que lo único que interesa al Campo de Gibraltar es un futuro que aporte riqueza en empleo, en inversiones y en competitividad fiscal, que deben quedarse aquí también.