Hoy hace justo un año que Algeciras y todo el país se conmocionaba ante las dramáticas imágenes que nos dejaba el ataque terrorista perpetrado en dos iglesias de la ciudad, en el que el sacristán de La Palma, Diego Valencia, perdía la vida y dejaba herido de gravedad al sacerdote salesiano de San Isidro Antonio Rodríguez. Un crimen que marcó a toda la ciudadanía por su vileza y su sinrazón. Esta tarde, a las ocho menos cuarto, en la plaza Alta, el mismo lugar y a la misma hora en la que era asesinado Diego Valencia, el ayuntamiento ha convocado una concentración en memoria de las víctimas y para mostrar el rechazo contra la violencia. Previamente a las siete y veinte, está previsto que se descubra una placa en la iglesia de Salesianos en recuerdo del padre Antonio. El auto judicial emitido en abril por el juez Gadea de la Audiencia Nacional permitió reconstruir con exactitud el execrable suceso.